Mucho se ha hablado sobre la figura de Rafa Nadal, acerca de sus triunfos y más si cabe, después de su título nº 14 en Roland Garros. Soy un seguidor de
casi todo tipo de deportes, aunque el fútbol, por motivos evidentes, a distancia del resto.
El tenis, es uno de los deportes que tiene más seguidores, bien como practicantes, bien como seguidores; yo particularmente, me encuentro en el grupo de los últimos, pero tengo un mínimo de experiencia, bien directamente, o a travcés de mis hijos, cuando practicaban este deporte; la suficiente, par conocer los principios del mismo, así como su dureza, física y mental.
Uno de los tenistas que hacen grandes este deporte, es, indudablemete, Rafa Nadal, que atesora unas cualidades innegables. Estoy hablando de un gran deportista, quien a sus cualidades tenísticas, se unen unas cualidades humanas que hacen de él una figura importante como tenista y como persona.
El mundo en general, necesita referentes de los que aprender y en mi opinión, Rafa Nadal, más allá de sus crencias, del tipo que fueren, es uno de esos iconos
que deben servir para nuestros hijos o nietos. Una persona que sabe ganar y que además, sabe perder, es un maestro; y yo deseo para el mundo del deporte
que continúe mucho tiempo con este ejemplo.
Toni Ortega
